Blogia
CINEMA DE PERRA GORDA

LOOKING FOR RICHARD (1996, Al Pacino) Looking for Richard

LOOKING FOR RICHARD (1996, Al Pacino) Looking for Richard

La historia del cortejo de las obras de Shakespeare por el medio cinematográfico es realmente extensa y suculenta. Sin poder ejercer como experto en la materia cierto es que el séptimo arte me ha permitido una familiaridad con las mismas y, todo hay que decirlo, en ocasiones excelentes productos fílmicos logrados a partir de esta inagotable fuente de inspiración –Olivier y en algunos casos Welles encabezando mi particular ranking-, y en otras títulos francamente deleznables –no dudo en situar en la cima de los horrores el ROMEO & JULIET (1996) perpetrado por el siniestro Baz Luhrrman-.

Pues bien, todo este conglomerado de expresiones cinematográficas tiene sin duda unos de sus exponentes más atrevidos y renovadores en la que sigue siendo la única realización del estupendo Al Pacino. Una propuesta sin duda personal y puesta en marcha a contracorriente aunque con la concurrencia de un buen grupo de entusiastas colaboradores y amigos que desde diferentes prismas se integraron en el proyecto ¿Cómo abordar un film como LOOKING FOR RICHARD (1996)? ¿Una transposición de pasado y presente a través de la hipotética filmación de un documental basado en el RICARDO III de Shakespeare? Así es ¿Una reflexión sobre la aparente inferioridad del actor norteamericano sobre el inglés a la hora de abordar la interpretación de su más genuino dramaturgo? Es algo evidente ¿Una reflexión sobre la neurosis, los miedos, las ironías y el narcisismo del actor? No se puede ocultar.

Todo ello y numerosas reflexiones más se dan cita en esta insólita mezcolanza de representación filmada con cámara al hombro y objetivos televisivos y de falso documental al que no le falta sentido del humor, en una insólita y sutil mirada sobre la sociedad norteamericana, el papel de la cultura y la función y corrupción provocada por el poder –uno de los temas centrales de la tragedia shakesperiana que ofrece el motivo central del film. La singularidad de LOOKING FOR RICHARD proviene no en la aparente originalidad del método, ya que sus imágenes me recordaban anteriores e ilustres practicantes del mismo como el Orson Welles de la genial FRAUDE (Fake: Question Mark.. 1973) –de la que el pasaje inicial que se reitera en la culminación del film es una cita expresa-, el no muy lejano CIUDADANO BOB ROBERTS (Bob Roberts, 1992) que proporcionó el estupendo debut en la realización del excelente actor Tim Robbins o el hoy tan en boga Michael Moore –aunque sin la zafiedad de este-.

A partir de un rápido montaje que selecciona bien la sucesión de sus imágenes, el film de Pacino se erige por momentos en reflexión, más adelante en ironía y seguidamente en representación. Las disgresiones y opiniones de expertos, célebres intérpretes shakesperianos se dan combinan generalmente con acierto a cortinillas, planos cortos, incluso finalmente a ciertas secuencias cuya “dramatización” parecen suponer “hitrailers” de la mencionada realización –es un decir- de Luhrrman, casualmente estrenada en aquel año ¿Sería una ironía más de esta película? Evidentemente, LOOKING FOR RICHARD demuestra la cultura de Al Pacino, pone en solfa e ironiza sus propios excesos como actor, su papel como consagrado “hombre de cultura” y al mismo tiempo ahonda en la lucha –y la de otros intérpretes como él- por preservar la fascinación Shakesperiana en un entorno muy diferente al que esta obra fue creada –por más que compartan la misma lengua-. La película de Pacino deslumbra por su configuración, puede quizá caracterizarse por algunos altibajos pero resulta en conjunto llena de interés, oscilante en su espíritu y progresivamente más entregada al original de la que parte, hasta llegar a los fragmentos finales de la misma que pese a su planificación podrían perfectamente erigirse como una perfecta ambientación de los pasajes en los que la muerte de Ricardo III se sucede en plena campiña. Esa circunstancia, la hábil variación en los escenarios de filmación y una evidente singularidad en el montaje son quizá los elementos que en mayor medida propician la satisfacción del resultado final de esta interesante propuesta.

Calificación: 3

4 comentarios

Duque De Gloister -

Es un gran documental, creo que logra su objetivo, el traernos una adaptacion de RICARDO III, que todos podemos entender.

Una gran produccion sin duda alguna.

Anónimo -

la verda me parecio genial y magnifica hay q tener cultura para criticarlo

Anónimo -

dsdsfsfds

Mº Jesus -

es un poco mala nmejor dicho ews una mierda