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CINEMA DE PERRA GORDA

BEFORE SUNSET (2004, Richard Linklater) Antes del atardecer

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Aunque reconozco que goza de un relativo prestigio en determinados sectores, en modo alguno me impresionó BEFORE SUNRISE (1995, Richard Linklater), discreta variación sobre los films de adolescentes. Vista hace bien poco en un pase televisivo me sigo confirmando en la existencia de su relativa frescura y buenas intenciones, del mismo modo que finalmente pesa en mí la interminable sucesión de diálogos y, en conjunto, esa sensación de tontería filmada con cierto buen gusto.

Es por eso que de alguna manera me temía caer en una reedición de aquella película, aunque algunos comentarios fiables me hacían presagiar un producto interesante. Pero ¿era posible encontrar una buena película que surgiera de la continuidad de una precedente que apenas me había interesado? Afortunadamente la magia del cine permite esas grandezas y he de reconocer con verdadera emoción que BEFORE SUNSET (2004, Richard Linklater) –ANTES DEL ATARDECER en España-, me ha parecido una de las mejores películas norteamericanas realizadas en los últimos años.

De forma sorprendente, con la base de la andadura de unos personajes que BEFORE SUNRISE había dejado en una interrogante de su reencuentro –y de cuya andadura se ofrecen unos oportunos insertos en los instantes iniciales de esta su continuación-, se convierte en una especie de excusa válida para retomarlos nueve años después. Jesse (Ethan Hawke) se ha convertido en el prototipo del triunfador. Es un escritor exitoso, mantiene su carácter bondadoso, vive en Nueva York, está casado y tiene un hijo de nueve años. Por su parte Celine (Julie Delpy) reside en París tras una serie de azarosas y fracasadas relaciones amorosas, mantiene su postura rebelde contra el género humano. Precisamente en París, Jesse está presentando su libro en un antiguo establecimiento. Allí acudirá Celine, reencontrándose con la persona con la que convivió únicamente una noche pero que –al igual de de forma recíproca en él- marcó por completo su vida. El joven escritor la detecta y se sorprende de su presencia aunque muy pronto la invita a pasear mientras espera para tomar el vuelo que le ha de hacer abandonar la ciudad.

Con esta frágil línea argumental, BEFORE SUNSET logra lo que a mi juicio en modo había conseguido su precedente. Pocas veces en el cine una película de estas características retomaba una historia tan tenue, y al mismo tiempo la dotaba de una sensación de verdad, de strip tease moral y de estremecida parábola sobre la irreductible levedad del ser humano y al mismo tiempo la eterna vigencia de los sentimientos. Richard Linklater, Ethan Hawke y Julie Delpy se lograron implicar hasta las entrañas en una historia que en buena medida les afectaba, logrando establecer un guión entre ambos lleno de libertades, tal y como igualmente las planteaba su narración, que finalmente se filmó en apenas 15 días. Y esa sinceridad, esa sensación de autenticidad, sencillez y al mismo tiempo eterna vigencia de lo que plantea ese reencuentro de dos personas que no se han visto en nueve años pero que mantienen vigente la fuerza de ese encuentro como su hubiera transcurrido apenas unas horas, tiene la ventura de trasladarse con un lenguaje cinematográfico sentido, elegante, acertado y brillante. La excelente combinación de larguísimos travellings que funcionan con la precisión de lo cotidiano, el montaje ajustado a la labor de los actores – personajes, la extraordinaria tonalidad crepuscular de su fotografía –uno de los elementos que más contribuyen a dotar de temperatura emocional a la película-, la excelente elección de marcos para las secuencias que en modo algunos obedecen a la “postal turística” que nos viene acostumbrando el cine –aunque aparezcan en pantalla algunos de los más hermosos lugares del París de siempre-, son elementos que combinados con tanta espontaneidad como sinceridad y sabiduría permiten que el resultado sea magnífico, creciente en la temperatura de la emoción, extraordinariamente bien modulado en la evolución de sus secuencias y, fundamentalmente –y para mí ese es el mayor milagro que puede ofrecer el cine- logrando que sus dos personajes traspasen la barrera de la pantalla y se impliquen en el sentimiento del espectador hasta hacerlos suyos.

Es obvio además que los temas que aborda esa larga conversación mantenido en su paseo por Jesse y Julie podría con otras imágenes, otro tratamiento cinematográfico, quizá ser tan farragoso como lo fue a mi juicio la andadura cinematográfico que posibilitó su encuentro en 1995. Pero en este caso el acierto de su planteamiento estriba en esa patina del paso del tiempo que se refleja en sus rostros, en sus miradas, sus actitudes y esa sensación en el fondo no asumida de aceptar la insatisfacción de sus vidas –más manifiesta en el caso de ella, pero igualmente latente en el de Jesse por más que este sea reacio a reconocerlo-.

Esa confesión de una pareja que compartió sus destinos durante apenas unas horas y que nueve años después no han olvidado ese rechazo que dieron al mismo por las circunstancias –seis meses después él acudió a la cita en Viena pero ella no pudo viajar al fallecer su abuela, una circunstancia de la que él nunca tuvo conocimiento-, tiene una encarnación cinematográfica realmente sensacional. Tanto Ethan Hawke –ya va siendo hora de reconocer que se trata de uno de los mejores actores norteamericanos de su generación- como Julie Delpy ofrecen tal grado de sutileza que no parece que interpreten sino que sean ellos mismos –en el fondo el mayor logro de todo intérprete. Especialmente he de resaltar la labor de Hawke, que en momentos sobrepasa la barrera de lo conmovedor –desde su transformación al vislumbrar a Julie en la librería precisamente cuando en sus palabras públicas estaba aludiendo a la importancia de ese amor que protagoniza su novela, la intensidad de su mirada en determinadas secuencias o la emotividad que consigue expresar en otras-. En cualquier caso el trabajo de ambos se integra de tal modo en la sencilla narrativa del film –que no obstante alberga con aparente cotidianeidad larguísimas secuencias de una sola toma-, equilibrando la desnudez en la confesión de ambos, bien sea en su paseo por el Sena, en el viaje en coche o en esa secuencia final que justamente debe considerarse una de las conclusiones más hermosas que ha brindado el arte cinematográfico en los últimos años –en el momento de su presentación en el Festival de Berlín 2004 fue coronada con una prolongada ovación-

En ocasiones un equipo reducido, la sencillez de dos estrellas que sabían lo que llevaban entre manos, un director quizá no muy prestigiado pero implicado hasta la médula, una muy corta duración que deja al espectador con ganas de más, una historia escueta pero que apela al sentimiento y un final que sabe valorar la importancia que estos tienen para dejar la sensación de perdurabilidad, permiten que una pequeña historia deje finalmente como resultado una gran película.

Quizá me exceda en el elogio, pero considero BEFORE SUNSET una sencilla prueba de amor y sentimiento en el cine de los últimos tiempos.

Calificación: 4

8 comentarios

Pilar -

No conozco "Before sunrise" y vi por pura casualidad en TV esta, ignorando que era secuela, así que no tenía ningún prejuicio sobre ella. Es una película espléndida, en que la sencillez se aúna maravillosamente con la profundidad. De una sinceridad que conmueve. No se pueden exponer más sentimientos ni mejor, con el solo recurso del diálogo, en manos, claro, de una magnífica dirección e interpretación.
Los interesantes rodeos y el largo disimulo iniciales por temor a un nuevo sufrimiento, desmoronándose ante la fuerza de un amor que devuelve la vida auténtica a los amantes, porque les devuelve a sí mismos. Espléndida.
¿Se atrevería Linklater con una 3ª parte?

R.Corvo -

Sucede que la primera vez que intenté ver esta película no terminé de verla. Al paso de unos años por suerte del destino volví a verla, entonces lo comprendí todo; porque para ese momento entendía el significado de un encuentro inesperado y del reencuentro añorado. Es como cuando de joven uno escucha la letra de una canción y sólo le gusta la música porque no entiende del sentimiento del que se habla y al paso de unos años uno conoce lo que significan sentimientos como el amor profundo o un desamor que mata. Así como un reencuentro con un alma gemela perfecta e imposible.

cecil -

la pelicula es fantastica...me encantó la canción de Nina Simone al final de la pelicula...alguien me puede decir como se llama esa canción?

Alejandra -

Varias cosas al respecto. Efectivamente, para mi, esta película reencuentra no solo a los personajes, sino además a todos los que teníamos la misma edad de ellos cuando dejaron de verse. Sorprende como fue tratado el tema de la evolución de los personajes, que sin querer (o con increíble astucia) nos hace identificarnos de nuevo con ellos, pese a los nueve años que han pasado. Aparte, el mérito del director (Richard Linklater es mi favorito, en todo caso), radica en meternos en una conversación de dos personas y hacernos sentir que su tema nos interesa...como con los amigos. Además, la grabación, prácticamente se realizó en tiempo real, con muy pocos cortes, lo que la hace tanto mas sincera (con poca edición, el tiempo para mentir también es reducido)
Notables actuaciones y banda sonora. Muy feliz, saludos a todos

mario -

alguien peude ayudarme a enteder en final de esta pelicula?. bueno la he visot anoche uan sola ves, y el final no me quedo claro..profavor alguein me podria ayudar

marce -

Es una película simplemente entrañable...

Santi -

Me aburrí mortalmente con la 1ª(Antes del amanecer) y al ver que se hacía la continuación tenía claro que no la pensaba ver, pero ya son varios los comentarios positivos sobre esta película y habrá que ir al videoclub de la calle del Teatro (el mejor de Alicante) a por ella.

Gerardo -

Apuntada en la lista de cosas a ver.