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CINEMA DE PERRA GORDA

WIND ACROSS THE EVERGLADES (1958, Nicholas Ray) [Muerte en los pantanos]

WIND ACROSS THE EVERGLADES (1958, Nicholas Ray) [Muerte en los pantanos]

Llevaba bastante tiempo intentando contemplar WIND ACROSS THE EVERGLADES (1958, Nicholas Ray) –solo emitida por televisión en España con el título MUERTE EN LOS PANTANOS-, por varias razones. Una de ellas es la de ser una de las pocas películas más o menos prestigiadas de su realizador que aún no había tenido ocasión de ver –está ubicada además en un momento brillante de su filmografía y antes de recalar en su conflictiva relación con el productor Samuel Bronston-. Pero fundamentalmente estriba mi interés en el hecho de contar con numerosas buenas referencias entre los seguidores de su trayectoria –entre los que me encuentro-. Es quizá por ello que pese a considerar que nos encontramos ante una obra de relativo interés, que contiene momentos hermosos y que en conjunto no se puede dejar de lado, el fantasma de la relativa decepción quede patente en mi apreciación y en modo alguno pueda ubicar esta película entre no solo las grandes obras de Nicholas Ray, sino incluso entre sus numerosos títulos más o menos conseguidos.

Nos encontramos en Miami a finales del siglo XIX. Se trata de una ciudad que inicia la llegada del progreso y en la que se ha comercializado indiscriminadamente la matanza de aves en sus entornos naturales al objeto de comercializar sus plumas para uso como adorno femenino –fundamentalmente en los sombreros-. Para intentar frenar esas matanzas llega allí Walt Murdoch (Christopher Plummer), joven profesor de ciencias naturales de Boston, quien inicialmente pierde el empleo que iba a ocupar, pero muy pronto logra otro como guarda de una sociedad encargada de la protección de las aves. Su inesperada pero coherente ocupación le llevará a territorio natural, contemplando tanto la implacable lucha de sus moradores animales dentro del engranaje natural, como las andanzas de los cazadores que en ella operan, encabezados por Cottonmouth (Burl Ives). Murdoch retornará a Miami tras contemplar el modus operandi de los hombres del veterano cazador, pero partirá de nuevo a los Everglades acompañado por un indio seminola perteneciente al equipo de este, pero que ha simpatizado con el joven valedor de las aves. Una decisión que finalmente le costará la pérdida de su propia vida de una forma realmente cruel –es atado junto a un venenoso árbol que llega a desfigurar su aspecto-.

De nuevo en Miami, Murdoch cortejará a la hija del responsable de la sociedad protectora, pero un nuevo incidente se producirá con uno de los hombres de Cottonmouth. Ello le llevará a enfrentarse nuevamente con el cazador, logrando que este se apueste su propia captura si lo logra llevar escoltado hasta Miami. Se ofrece con ello el traslado de este en unas condiciones paulatinamente más adversas para Murdoch –se llega a perder en la inmensidad de los pantanos-, pero cuando todo apunta a que morirá en su batalla casi perdida contra la naturaleza, será Cottonmouth quien perderá su vida al ser mordido por una serpiente.

De todos es conocido los problemas que en el proceso de confección de WIND ACROSS... se plantearon entre Nicholas Ray y Budd Schulberg, el segundo guionista del film y uno de los productores del mismo. Al parecer, era el propio Schulberg el que quería filmarlo y logró modificar su montaje una vez Ray finalizó el rodaje. Creo que esas desavanenencias se advierten en el conjunto e impiden la consideración del resultado final como un título plenamente logrado. Ya desde su secuencia inicial, la insistencia de una voz en off”que posteriormente no tendrá mayor presencia, nos hace advertir que el inicio está cortado. Una sensación bastante manifiesta y que se extiende hasta otros momentos de la película, que oscila en su modulación por la alternancia de bellos momentos con otros quizá no tan logrados. Entre los primeros cabría citar buena parte de las imágenes desarrolladas en los pantanos e incluso los insertos que nos describen la cruel lucha de la fauna allí albergada para sobrevivir eliminándose unos a otros. Del mismo modo destacaría las secuencias que revelan tantos los métodos de Cottonmouth –las peleas para conceder techo a los dos presos fugados que han llegado hasta ellos; el detalle de esa pequeña serpiente venenosa que guarda en su bolsillo; la noche de bebida que Murdoch mantiene con sus hombres, amaneciendo totalmente lleno del barro del suelo; las matanzas que ejecutan con las aves; la cruel muerte a que someten al indio seminola que ha decidido ponerse de parte del joven defensor de las aves-, como la secuencia en la que el joven profesor corteja a la hija del presidente de la sociedad protectora, en la que la influencia del entorno natural es realmente brillante, o los instantes finales en donde la lucha entre los dos protagonistas en el entorno natural hostil llega a sus máximas cotas expresivas, son indudablemente momentos brillantes en un conjunto de cualquier forma lleno de irregularidades.

Entre ellas habría que empezar por la equivocada elección del entonces debutante Christopher Plummer para encarnar al joven protagonista. Es un lastre que pesa demasiado en un film en el que, al contrario de lo que posteriormente manifestó Ray, le hubiera beneficiado enormemente ser filmado en pantalla ancha –formato en el que el realizador era un consumado especialista-. Por más que fuera totalmente rodado en escenarios naturales creo –y es una opinión muy personal- que el componente telúrico de la misma no es todo lo logrado que cabría desear. A ello cabría añadir que hay un elemento que aunque apunta bastantes posibilidades no llega a alcanzar su debido aprovechamiento. Este no es otro que la propia relación personal que existe entre Murdoch y el propio Cottonmouth. El primero le llegará a decir “es usted un caballero”, mientras que el veterano cazador de aves se muestra conmovido cuando finalmente ha atacado al primero al pensar que este pretendía matarle, prácticamente dejando morirse al final en medio de la naturaleza –y en ello hay que destacar el plano más hermoso de la película al encuadrar al veterano cazador muerto mirando el paisaje natural por el que circula la canoa de Murdoch-. Quizá cabría pensar que en ello hay una soterrada relación homosexual –Cottonmounth siempre está acompañado por un joven rubio musculoso, y en varias ocasiones destaca la apostura de Murdoch-. En todo caso, y aún contando con esos elementos destacables, creo que con WIND ACROSS... nos encontramos en buena medida ante un resultado fallido –en buena medida por los factores de producción ya señalados-, pero quizá desde la propia concepción de la película. Y es que creo que cuando un film resulta admirable, no hay amputación o variación que le haga modificar su condición –dos ejemplos citados al vuelo serían GREED (Avaricia, 1924. Erich Von Strohëim) o NGHT OF THE DEMON (La noche del demonio, 1957. Jacques Tourneur)-.

Calificación: 2’5

1 comentario

FuerzaVital -

Creo que a pesar de ser una peli irregular tiene unos implusos tan fuertes que el componente acuoso-fangoso sale a resaltar, sale a flote para salvar la peli de Ray.
El prota actua de manera que contrasta muy bien con Cottonmouth, me molan esas actuaciones irreales.